Ayer día 27 de enero, es el día de conmemoración de las víctimas del Holocausto. Y hoy me gustaría hablar de algo que no se suele comentar demasiado: ¿Cómo se llegó a aquello?
El personal del campamento se toma un día libre
Estas fotos del personal de Auschwitz disfrutando de agradables días libres. Parecen monitores de campamento, pero su trabajo consiste en matar a gente de forma horrible, y lo disfrutaban.
Un médico soviético examinando a un sobreviviente.
Foto tomada en abril de 1945 por el mayor Clarence Benjamin, muestra un tren de prisioneros judíos que habían sido interceptados por las fuerzas aliadas. En ese momento supieron que el tren no se dirigía a un campo de concentración y fueron liberados.
¿Cuántas personas murieron en Auschwitz?
Aunque Auschwitz II tuvo una enorme responsabilidad en muchas muertes, en todos los campos se cometieron asesinatos.
Según el USHMM, la mejor estimación indica que aproximadamente 1,1 millones de personas fueron asesinadas en el complejo de campos de Auschwitz entre 1940 y 1945.
De las 1,1 millones de personas asesinadas, 960.000 eran judíos (es por eso que Auschwitz tiene un papel crucial en el exterminio del Holocausto)
74.000 eran polacos no judíos
21.000 eran romaníes (gitanos)
15.000 eran prisioneros de guerra soviéticos
Y de 10.000 a 15.000 eran de otras nacionalidades
Los prisioneros no recibían ni comida ni agua durante días.
Prisioneros de guerra alemanes, viendo una película sobre los campos de concentración
Más imágenes del infierno
La mayoría de los prisioneros llegaban al campo en tren, después de un terrible viaje en vagones de carga que duraba varios días sin comida ni agua.
Las maletas amontonadas en una barraca. La ilusión, antes de subir al tren, hacía que rotularan el equipaje. Pero todo les era sacado a los prisioneros. Ni siquiera el nombre les quedaba. De ahí en adelante serían un número (tatuado)
"El trabajo los hará libres", dice el cartel de hierro a la entrada de Auschwitz.
Las prisioneras se desplazan por el campo de concentración. Algunas se toman del brazo. Están desabrigadas y se percibe el frío. Las despojaron hasta del pelo. En los ojos, las miradas perdidas.
Zapatos confiscados a los prisioneros, hoy en uno de los muchos museos sobre el Holocausto
Hornos en los que se incineraban los cuerpos de los prisioneros que eran exterminados o que fallecían por las condiciones inhumanas en las que se encontraban.
Cientos de gafas que encontraron los soviéticos.
Las paredes de la primera cámara de gas de Auschwitz, con las señales de uñas que demuestran el horror antes de morir.
Fuentes-Restaurando su dignidad- Infobae-CNN-El País- La aventura de la Historia